Preparados con calzado cómodo y las chaquetas, porque hacía frío nos dispusimos a realizar con los monitores y los niños un paseo entre Aguilar y el yacimiento de Contrebia Leucade, ya que allí es donde acampaban. El entorno como supongo que sabéis es ideal, con esas grandes montañas y el río que viajaba a nuestro lado, nos iba dejando sin palabras, todo tan verde, tan primaveral, los niños tan contentos recorriendo un sendero que les llevaba hacía una gran acampada, a la que estaban deseando llegar, porque ¡¡¡¡Como les gusta acampar!!!
Los monitores repartieron a cada grupo sus tiendas, y los chicos encantados recogían sus sacos para llevarlos a cada una de ellas, todos intentaban llegar a su tienda el primero, dejaban sus cosas y se preparaban para cenar. Cuando el sol se despedía y la luna hacía su aparición, los niños encendían las linternas, y las cocineras llamaban a cenar así que niños, monitores y el AMPA cenaban un gran bocadillo(y cuando digo gran, lo digo con todas las letras, jajaja), que las cocineras prepararon con mucho cariño para todos.
Nosotros regresamos a casa y ellos quedaron en sus tiendas listos para dormir, esperamos que hayan pasado buena noche.
Nosotros desde este humilde blog, damos las gracias a los monitores por cuidar tan bien de los peques, por preparar tantas actividades, por estar tan pendientes de ellos, por no dejarles aburrirse ni un solo instante, porque os aseguro que ninguno tiene ganas de que termine el campamento y eso es gracias a la organización y a la dedicación de unos grandes monitores.
También queremos dar las gracias a la organización del campamento por habernos invitado, a todos los monitores por habernos hecho sentir tan bien, por acompañarnos en el camino, por compartir con nosotros los momento de este gran campamento. Esperemos que el año que viene nos dejen repetir, jejeje. MUCHIIIIIIIIISIMAS GRACIAS POR TODO.
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